Los compañeros y compañeras de La Cámpora Bahía Blanca y La Cámpora Coronel Rosales participaron el lunes 15 de diciembre de la movilización contra la impunidad de un sector del Poder Judicial, que se realizó frente al Juzgado Federal de Bahía Blanca. Allí también estuvieron varios organismos de derechos humanos (APDH, H.I.J.OS., Red por la Identidad, Movimiento Verdad y Justicia de Punta Alta) y la Mesa por el Juicio y Castigo- Unidos y Organizados.
Los militantes se hicieron presentes para repudiar las maniobras de funcionarios judiciales de Bahía Blanca para favorecer a Vicente Massot, director del diario La Nueva Provincia, concretamente las presiones llevadas a cabo por parte de la defensa del empresario con el fin de que el juez subrogante Alvaro Coleffi se apartara de la causa Massot.
Estas maniobras constituyen un ejemplo del funcionamiento de un sector del Poder Judicial que intenta entorpecer la investigación a los civiles partícipes del terrorismo de Estado: Vicente Massot, que ya ha debido presentarse a declarar ante la Justicia en tres ocasiones, se encuentra acusado de haber participado, como miembro de la cúpula directiva de la empresa, en la instigación de los secuestros y homicidios de los obreros gráficos y delegados gremiales Enrique Heinrich y Miguel Ángel Loyola, que configuraban una molestia para la firma por su activa militancia sindical. Además, se acusa al empresario y al núcleo directivo del que forma parte de haber efectuado aportes esenciales al genocidio de la última dictadura mediante la construcción de acciones psicológicas y campañas de propaganda negra a favor del terrorismo estatal, algo que ya había considerado comprobado el Tribunal que en 2012 dictó sentencia en el histórico primer juicio por delitos de lesa humanidad en la ciudad.
Los militantes se hicieron presentes para repudiar las maniobras de funcionarios judiciales de Bahía Blanca para favorecer a Vicente Massot, director del diario La Nueva Provincia, concretamente las presiones llevadas a cabo por parte de la defensa del empresario con el fin de que el juez subrogante Alvaro Coleffi se apartara de la causa Massot.
Estas maniobras constituyen un ejemplo del funcionamiento de un sector del Poder Judicial que intenta entorpecer la investigación a los civiles partícipes del terrorismo de Estado: Vicente Massot, que ya ha debido presentarse a declarar ante la Justicia en tres ocasiones, se encuentra acusado de haber participado, como miembro de la cúpula directiva de la empresa, en la instigación de los secuestros y homicidios de los obreros gráficos y delegados gremiales Enrique Heinrich y Miguel Ángel Loyola, que configuraban una molestia para la firma por su activa militancia sindical. Además, se acusa al empresario y al núcleo directivo del que forma parte de haber efectuado aportes esenciales al genocidio de la última dictadura mediante la construcción de acciones psicológicas y campañas de propaganda negra a favor del terrorismo estatal, algo que ya había considerado comprobado el Tribunal que en 2012 dictó sentencia en el histórico primer juicio por delitos de lesa humanidad en la ciudad.
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